jueves, 24 de noviembre de 2011

PRIMERA DERROTA DEL VALENCIA EN CASA,…¿ALGO INSIGNIFICANTE?

Jornada de liga post-partidos de selecciones, estado que nos adormece de preocupaciones, que muchos vivimos sin disfrutar del fútbol y que rompe totalmente el curso normal de la pasión liguera. Va siendo el momento de construir calendarios únicos, en primer lugar porque partido de selección es igual a “fin de semana pestiño”, y en segundo lugar porque algo tan honroso como jugar con el país de turno se ha convertido en un factor que distorsiona el fútbol de clubes, en donde equipos le prestan por el artículo treinta y tres capital propio con el único pago a cambio de recibirlo cansado, lesionado y en el peor de los casos costeando cualquier operación médica que pudiera necesitar. El problema es que el fútbol vive en un mundo aparte del resto, totalitario en todos los sentidos, donde unos señores deciden lo que conviene y lo que no, al margen de la ley, porque si por la ley fuese nada de lo que harían se les sería permitido.

Y a estas que llaman Virus FIFA, enfermedad de ricos y que viene siendo la Perrería FIFA, visitaba el Real Madrid a un equipo dificilísimo en estado de gracia. Digamos que tenemos dos versiones del Valencia CF, la que juega contra los demás y la que juega contra el Real Madrid, la caja de los truenos el fichaje de Pedja Mijatovic allá por el año 1996. El futbolista en cuestión prometió no dejar la disciplina Ché, hasta que evidentemente llegó una oferta del Real Madrid pagando el doble, el Valencia se enroca a no negociar y el Real Madrid legítimamente deposita la clausula previo aviso y dos meses antes de empezar la competición. Volvemos al mundo paralelo del fútbol, algo que en la vida cotidiana se repite día sí y también, aquí se entra en una realidad paranormal y sobre la que el Real Madrid se ve obligado a llevar esa penitencia siempre que llega a Valencia. El FC Barcelona con Rivaldo en el Deportivo de la Coruña hizo similar jugada, pero a dos horas del cierre de fichaje y sin previo aviso por parte de nadie, no costó una palabra a nadie.

El partido comenzó muy bien para el Real Madrid, Khedira y Lass Diarra son bastante menos desastrosos que el centro del campo rival y arriba Karim Benzema como estandarte del equipo. Este último acoplado perfectamente a la disciplina de su técnico y embragado ante cualquier acontecimiento que ocurra en el campo, suyo fue el primer gol previo pase de Xabi Alonso que pilla por sorpresa a todos, cámara incluido, menos al goleador en cuestión. El Valencia como suele hacer en estos casos abrió el partido a las trincheras. David Albelda comenzó a disfrutar del fútbol que todos sabemos y del que afortunadamente nos privó en la selección, Jonas y Parejo eran simples comparsas. Falta de cartulina roja donde le sacan amarilla y cuatro no pitadas porque tiene tiritando a medio estamento arbitral. Es en el descanso cuando el Real Madrid no vuelve a ser el mismo, el cansancio aprieta y los aullidos de la afición arrecian más si cabe. Sergio Ramos remata con la testa un gol y distancia al Real Madrid a la victoria. Fue cuando el Valencia saca a Pablo Hernández aparta a Albelda y el campo florece. Florece porque cuentan con un Soldado, que proviene del Castilla y del que el Real Madrid no dijo ni esta boca es mía a su traspaso, futbolista genial, de potente remate y que tendría que dejar a Torres junto a Albelda en el presidio de los horrores de la selección española. Acorta distancias, Cristiano las vuelve a disipar y es en el 3-2 cuando el Real Madrid sufre lo indecible y estalla el escándalo que todo el mundo andaba buscando con lupa siempre que juega el Real Madrid. Allá, a un minuto pasado del descuento surge de un córner una jugada fuera del tiempo reglamentario, precedida de un empujón a Xabi Alonso, que en el caso de materializarse sería fuera de juego de Soldado o parada de Casillas en el mejor de los casos, y que la jugada en cuestión no es nunca mano de Higuaín. Pero no, al Real Madrid no se le quiere ver perder, se le quiere ver ganar robando y en este caso no ha sido así. A partir de ahí se empieza a desatar lo de siempre, la tempestad, lo que ocurrirá en el caso de que el Real Madrid gane al Atlético o FC Barcelona, un escándalo arbitral que no existió y seguro que tampoco existirá las dos próximas jornadas. Se toma como verdadero algo que es rotundamente falso y por decirlo más alto pasa a la historia como una verdad impenetrable.

El resultado final es 18 faltas del Real Madrid por 22 del Valencia, y dos tarjetas amarillas del club levantino por siete del Real Madrid, de las cuales 6 fueron verbales. Y en esas acabó el partido, no por el momento de dulce declarado que está viviendo el Real Madrid, no por el chicharrazo de Karim Benzema, ni por ser la primera derrota del Valencia en casa (algo insignificante), ni por los láseres que apuntan a Cristiano Ronaldo cada partido y que literalmente es algo infame,...Sino por el robo en base a una jugada enmarañada que a las claras le da con el pecho y sobre todo por la celebración del entrenador José Mourinho ¿Habrase visto tal acto de arrogancia y chulería?

El Real Madrid sigue marcando el paso, primer escollo superado, el segundo es el Atlético de Madrid siempre indescifrable y siempre impredecible y el tercero la punta del iceberg contra el FC Barcelona. Este cuenta con un parcial brutal en casa de 30-0 frente al del Real Madrid que es de 26-4 (Solo anotando Rayo Vallecano, Getafe, Betis y Osasuna en sendas goleadas). Lo que ocurre que tampoco se habla del parcial de fuera de casa tanto o más difícil de obtener como el primero, que es de 8-6 del FC Barcelona frente a 18-3 del Real Madrid, solamente el Levante y Valencia le han metido un gol. Pero sí se habla del 2-3 cosechado por los culés ante en un equipo de primer nivel como es el AC Milán que cuando se enfrenta al Real Madrid es un equipo de viejos. ¿Habrase visto tal acto de arrogancia y chulería?

Un abrazo.

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